Originalmente la ruta que teníamos prevista para hoy era la del “Valle del Aliso”, una circular con inicio y fin en Cabeza del Buey, con posibles visitas a algunas estaciones con pinturas rupestres y la posibilidad de entrar en la finca privada para ver las “Termas Romanas de la Nava”, pero mira tu por donde, mientras desayunábamos, los que que habían elegido ir a la churrería, se enteraron que precisamente hoy estaba prevista una macro-montería por esa zona, y nos recomendaban que no nos acercáramos por allí, así que hubo que cambiar de planes sobre la marcha, y tras barajar los tracks de un par de rutas, al final nos decidimos por realizar una circular por la Sierra de las Cabras, con algo más de kilometraje que la ruta prevista, porque a los 17 km de la ruta había que añadir algo más de dos kilómetros (ida y vuelta) para ir desde la carretera donde nos dejaría el bus, hasta el punto de inicio de la ruta.
Como nuestra compañera Concha es de Cabeza del Buey, sabía en que punto de la carretera que circunvala el pueblo teníamos que bajarnos del bus, para rápidamente coger un camino a la izquierda de la carretera por el que nos iríamos aproximando a la Sierra de las Cabras, dispuesta en dirección Nor-noreste, donde junto a unas grandes naves, está el punto de inicio y fin del recorrido circular.
Nos habíamos bajado el track de esta ruta, así que tocaba seguirlo desde aquí, siguiendo el recorrido circular en sentido contrario a las agujas del reloj, dirigiéndonos en ligera bajada hacia un peñón rocoso cercano al camino, donde tuvimos la suerte de poder divisar hasta medio centenar de buitres sobrevolando y algunos posaron, dejándose fotografiar.
Esta foto con los dos buitres posando es del compañero de ASTOLL, Enrique
Dejamos a la derecha las ruinas de un antiguo molino, cruzamos la vía ferroviaria y un panel informativo nos instruye sobre el recorrido y sobre las diferentes aves que pueden verse en esa zona y sobre todo en ese peñón que antes he comentado, aunque cualquiera de los altos cantiles de esta sierra es un buen lugar para ellas.
Seguimos camino, ahora un camino-pista amplio, con buena huella, algo insípido para mi gusto, aunque por suerte con buenas vistas de las sierras al fondo, y con la ruinas de la antigua estación de la Cabra, algo más abajo, junto a la vía ferroviaria, ¡bonitas estampas!. El camino continua en subida suave y continuada, la primera de las dos subidas largas de esta ruta, en la que desde que empezamos vamos siguiendo el trazado de un GR, marcado con sus características marcas horizontales blancas y rojas, y que realmente es el antiguo camino que lleva hasta las localidades de Peñalsordo y Zarza Capilla, siguiendo linealmente, por la parte baja, el trazado de la Sierra de las Cabras y el Torozo.
Ruinas de la antigua estación de la Cabra.
Justo al terminar la subida, en el alto de las Cabras, y realizar un pequeño descenso girando hacia la izquierda para ir bordeando la sierra, es cuando para mi gusto comienza la parte más bonita y entretenida del recorrido, con espacios más cerrados, con los zonas altas rocosas de la sierra a nuestra izquierda, con sus laderas cubiertas de la típica vegetación de bosque mediterráneo, y más abajo el paso por grandes fincas repobladas de pinos usadas a modo de coto para la caza mayor.
Bonitas vistas panorámicas desde la primera subida.
Seguimos el camino, el GR, dirección a Peñalsordo, según las indicaciones, en un recorrido agradable, entretenido y con bonitas vistas, hasta llegar a un desvío, donde abandonamos este camino, este GR, que sigue recto mientras nosotros seguiremos por el camino más estrecho de la izquierda, flanqueado por matorral y zarzas, con algunos charcos de agua que ocupan todo el camino, dejando a los pocos metros de cogerlo, una buena fuente-estanque a la izquierda y que en época estival puede hacer las delicias de más de uno.
El recorrido sigue siendo muy agradable por esta zona, tanto para caminar como visualmente, pasando por algunas huertas y viejas paredes de piedra que delimitan propiedades y caminos. Por esta zona, a la izquierda, en el Alto de Bercilaejo (828m.), es donde se encuentra una de las muchas cuevas-abrigos con representaciones de pinturas rupestres esquemáticas y más concretamente una de las más famosas, la «Cueva de los Perros«. Al llegar a una nueva bifurcación, seguimos rectos, y es aquí donde comienza la segunda y más larga subida de la ruta, al principio por camino con buena huella, pero pronto el firme se hace más irregular, con más piedras, al tiempo que la pendiente también va en ligero aumento, hasta que por fin desemboca en un amplia pista que viene por la derecha y que sigue ascendiendo durante unos metros más, hasta llegar al collado entre dos sierras, el Puerto de la Umbría, el final de la subida y el final de la parte más interesante del recorrido, así que antes de emprender la bajada, bien merece la pena volver la vista atrás y disfrutar de la amplia panorámica que nos ofrece este emplazamiento.
Vista panorámica desde el final de la segunda subida, al mirar la vista atrás. La flecha amarilla indica la posición de algunos de mis compañeros (haz clic para ampliarla).
El resto de la ruta, transcurre toda por una pista ancha, abierta, insípida, aburrida, primero en bajada y después «llaneando», girando a la izquierda para llegar de nuevo al punto de inicio del recorrido junto a la naves, cerrando el círculo; unos cuantos kilómetros que sobran, son poco entretenidos, poco estimulantes, muy monótonos y fruto de ello es normal que acabe por fluir el aburrimiento, y no son solo sensaciones mías, es lo que comentábamos entre algunos de los del grupo integrado hoy por 47 personas.
En definitiva, que el tramo desde el inicio de la ruta al peñón donde asoman los buitres, o hasta que divisamos las ruinas de la antigua estación de la Cabra, se podría decir que es un tramo de aproximación con vistas a la sierra y que es desde allí donde es el tramo más intersante y bonito de la ruta, hasta llegar al final de la segunda subida, el resto, o sea, la bajada y el llaneo final por pista insulsa y aburrida sobra, a excepción de las vistas a lo lejos de la localidad de Cabeza del Buey rodeada de sus sierras, pero si se quiere hacer la ruta circular es lo que toca.
Vista a lo lejos de Cabeza del Buey rodeada de sus sierras(haz clic para ampliarla).
Terminada la ruta, el autobús nos recoge en el mismo punto de la carretera donde nos había dejado antes, y después camino de la ermita de Belén, donde nuestra compañera “Conchita” nos tenía preparado una sorpresa, así que desde aquí, darle las gracias por la comida, por los buenos momentos y por las atenciones que tuvo con el grupo en esta visita a su tierra.
Para terminar, no pudo faltar el apartado cultural, con la visita a la ermita y al pequeño y coqueto claustro, y por supuesto algunas fotos de grupo….
El Track de la ruta lo tenéis pinchando EN ESTE ENLACE. Y aquí os dejo un pequeño vídeo de la «Cueva de los Perros«, de 3 minutos, elaborado por la «Asociación Cultural Manzarabía» de Cabeza del Buey.